31 dic 2012

Empresas no tan legales

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalaciosyasociados.com
fuente:http://www.dinero.com/actualidad/nacion/articulo/empresas-no-tan-legales/167016


La Dian verificó el software contable a 1.055 empresas en el país, en auditorías llevadas a cabo dentro de los programas de fiscalización y campañas de facturación. 16 son investigadas por la Fiscalía.

La Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales, Dian, a través de su Subdirección de Gestión de Fiscalización Tributaria reportó ante la Fiscalía General de la Nación a 16 empresas por la presunta defraudación a derechos de autor por el uso ilegal de software.

Las auditorías se realizaron en el marco de los programas de fiscalización y campañas de facturación durante el año 2012.

Cuando la Dian encuentra irregularidades en el uso del software, reporta los casos directamente a la Fiscalía, la cual toma las medidas correspondientes con sanciones de hasta ocho años de cárcel y multas de hasta 1.000 salario mínimos mensuales legales vigentes. 

Durante el 2012 se verificó el software contable y de facturación a 1055 empresas en el país.

La Dian explicó que sus funcionarios solicitan a las empresas las licencias que demuestren la legalidad de los programas, las facturas de compra, la contabilización del intangible, equipos y demás aparatos en los que se encuentra instalado el software.

También requiere la identificación y ubicación de los establecimientos de comercio, oficinas y demás lugares en los que se emplea el respectivo programa adquirido o desarrollado.
La entidad además solicita explicación del manejo y utilización que se da en la empresa y el estado de cumplimiento de las normas sobre propiedad intelectual y derechos de autor por parte del contribuyente.

Según un estudio de International Data Corporation (IDC) y Business Software Alliance (BSA), Colombia tiene una tasa de piratería de software del 53% y se mantiene líder en la región, junto a Brasil, con el más bajo porcentaje en este delito, sin embargo, está por encima del índice mundial que es de 42%.

Lo anterior genera pérdidas millonarias en el sector de hasta $US280 millones, además de otros inconvenientes relacionados con el desempleo, pérdidas en la recaudación fiscal y 
limitaciones en la innovación.
+ dalmer vargas

13 nov 2012

InterBolsa: qué hay detrás

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables"
En el mundo del capitalismo financiero ha quedado demostrado que cualquier cosa puede pasar. Hace cuatro años, Wall Street se estremeció con la bancarrota de uno de sus gigantes más emblemáticos: Lehman Brothers, el más antiguo banco de inversión de Estados Unidos con 158 años de historia. Hoy Colombia se sorprende con la caída de InterBolsa, la firma comisionista más importante del mercado de valores, que hasta hace pocas semanas era la envidia del mundo financiero nacional.

Los últimos días del colapso del gigante colombiano fueron angustiosos y tensos para todo el mundo. Los dueños de la firma bursátil buscaban infructuosamente quién salvara la compañía del descalabro, el gobierno sudaba la gota fría temiendo por el coletazo que podría significar la caída del Goliat en el mercado local y el temor crecía como espuma entre los clientes e inversionistas.

Para enviar un mensaje de tranquilidad y evitar que el pánico se extendiera, el superintendente financiero, Gerardo Hernández, intervino rápidamente la compañía y en un último esfuerzo, convocó a los grandes bancos del país para buscar alternativas con el ánimo de proteger a los inversionistas. 

El lunes festivo, 5 de noviembre, las oficinas de la Superintendencia Financiera eran un hervidero de gente buscando soluciones. Mientras los funcionarios del gobierno les pedían explicaciones a los máximos accionistas de InterBolsa, los directivos y abogados de dos de los más grandes bancos del país -Bancolombia y Davivienda- analizaban la posibilidad de quedarse con algunos de los negocios de la firma bursátil. Pero era tal la complejidad financiera de la compañía de bolsa y las dudas sobre eventuales contingencias que se podrían presentar a futuro, que los dos bancos llegaron a la misma conclusión: la firma ya no era la niña más bonita del baile como se pensaba. 

El ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas, por su parte, preocupado por lo que pudiera pasar con los 1,6 billones de pesos en títulos de deuda pública que manejaba InterBolsa, respiró tranquilo cuando Bancolombia decidió quedarse con este negocio, pues se evitó que los títulos (TES) del Estado se quedaran sin liquidez, dándole un duro golpe a las finanzas públicas.

Fue ese un día largo y dramático y tuvo su clímax cuando se tocó el espinoso tema de cómo los mayores accionistas de InterBolsa responderían a los inversionistas afectados. Después de unos tires y aflojes, llegaron a un acuerdo con el superintendente Hernández para firmar un pagaré por 80.000 millones de pesos como respaldo ante cualquier eventualidad en la liquidación de la firma.

Pero en las últimas semanas, no solo el gobierno y los accionistas de InterBolsa andaban con los nervios de punta. Algunas de las otras 28 firmas comisionistas que operan en el mercado temían que el gigante bursátil les cayera encima y las llevara a una crisis de liquidez; los bancos, a su vez, evaluaban la situación día a día y los inversionistas, grandes y pequeños analizaban si el desarrollo de la crisis de InterBolsa podía llegar a afectarlos a ellos. 

La situación fue tan grave que el Banco de la República, en junta extraordinaria, decidió abrirles una ventanilla de liquidez a las demás firmas comisionistas para evitar un efecto dominó que se llevara por delante el mercado de valores. 

Lo que en el fondo estaba quedando en evidencia era que los problemas de liquidez que InterBolsa venía enfrentando desde hace varios meses, y que se había agudizado en las últimas semanas, eran tan solo la fiebre del paciente, pues el cuadro clínico era mucho más complejo. 

Nadie entendía cómo la firma comisionista más importante del país, pilar esencial de un creciente grupo financiero y empresarial con ramificaciones en todo tipo de negocios dentro y fuera de Colombia, había llegado a la liquidación. A las autoridades que intervinieron las oficinas principales les bastó pocas horas para darse cuenta de que la caída de la firma podría ser solo la punta del iceberg. Como le dijo uno de los investigadores a SEMANA: "Esta historia es una caja llena de sorpresas". 

Después del terremoto que sacudió a la comisionista, los ojos de los medios y las autoridades están ahora puestos en las entrañas del grupo empresarial: la relación con fondos en el exterior, los vínculos entre las sociedades, las filiales en Panamá y Brasil, los vehículos de inversión que se usaban en Colombia y hasta las peleas y fricciones entre los dueños y ejecutivos que se están empezando a ventilar públicamente.

La increíble historia del auge de InterBolsa es tan fascinante en su conquista del mercado como compleja en su derrumbe, debido a que a su alrededor hay una estructura financiera difícil de entender y un andamiaje jurídico kafkiano, donde los mismos socios tienen participaciones en varias sociedades en Colombia y en el exterior, lo que dificulta desenredar sus operaciones.

En aras de la claridad, el capítulo InterBolsa se podría sintetizar en tres grandes temas y una conclusión: el primero, las millonarias operaciones con acciones de Fabricato que llevaron a la firma al descalabro; el segundo, las operaciones que los propios accionistas hicieron con acciones de InterBolsa, y el tercero, las relaciones de la holding con el Fondo Premium Capital Appreciation Fund constituido en Curazao. La conclusión es que esta historia podría poner en tela de juicio el papel de los reguladores y supervisores del mercado de capitales.

Sobre el primer punto, el de Fabricato, hay que decir que las llamadas operaciones 'repo' son legítimas y usuales en los mercados. Se trata de mecanismos de venta con pacto de recompra de títulos para conseguir liquidez. Lo que dio pie a la desbocada de InterBolsa fue el monto y la sobrevaloración del precio de la acción de Fabricato. La firma tenía operaciones por 300.000 millones de pesos en 'repos' de la textilera, cuyo precio de la acción estaba generando desconfianza en el mercado. Muchos inversionistas no querían negociar con ese título pues temían que el precio cercano a los 90 pesos estuviera inflado. Hasta hace poco más de un año se cotizaba a 30 pesos, y un crecimiento de esa magnitud no reflejaba la realidad de la empresa que estaba en dificultades. 

El hecho de que el mercado le quitara la confianza a la acción de Fabricato fue fatal para InterBolsa, pues se quedó sin la manera de fondearse con estos mismos títulos y, en consecuencia, sin liquidez para responderles a sus clientes que querían su dinero. La firma comisionista comenzó a sufrir las consecuencias del riesgo que implicaba haber hecho una apuesta de esa magnitud en un solo título y con el cierre del crédito en los bancos la tormenta se volvió perfecta.

En el segundo punto, hay que mencionar que la comisionista era el jugador más activo en el sofisticado mundo de los 'repos'. Manejaba en este tipo de operaciones alrededor de 600.000 millones de pesos. Incluso, hacía 'repos' con las mismas acciones del Grupo InterBolsa, algo que para muchos era un mecanismo poco ortodoxo de buscar liquidez. "Es como transferirles el riesgo de la compañía a los inversionistas y a sus propios clientes", dijo un corredor de bolsa. Porque si ocurre un desastre con la comisionista, los inversionistas pueden pagar los platos rotos. Ahora que la firma entró en liquidación, estos inversionistas que se quedaron con las acciones de InterBolsa en sus manos se preguntan si les van a honrar la deuda. Ellos entregaron dinero a cambio de las acciones de InterBolsa que hoy han perdido casi la totalidad de su valor. Habrá que ver si con el pagaré de los 80.000 millones de pesos que firmaron los accionistas mayoritarios de InterBolsa se cubren estas obligaciones. 

El presidente del Grupo, Rodrigo Jaramillo, le dijo a SEMANA que estos 'repos' son operaciones legales que se han hecho con toda la transparencia del caso y reconoce que en el tema de Fabricato asumió un excesivo riesgo por la alta concentración.

Aunque en estricto sentido, todas las inversiones que se hacen en el mercado bursátil conllevan riesgo, en el caso de los 'repos', este crece cuando se hacen con acciones ilíquidas, es decir que no se transan fácilmente en el mercado o cuyo precio puede caer abruptamente. En el mercado este tipo de 'repos' son denominados como 'tóxicos'. La acción de Fabricato tenía bursatilidad pero algunos se preguntan si esta liquidez era creada artificialmente por los mismos comisionistas. 

Ahora bien, el tercer gran tema de esta historia es aún más complejo. Se trata de las relaciones que el Grupo InterBolsa ha tenido con el Fondo Premium Capital Appreciation Fund constituido en la isla de Curazao. Este es el nombre más mencionado en los últimos días alrededor de este escándalo bursátil. 

Inversionistas consultados por SEMANA señalaron que a través de este fondo se captaban ahorros de personas en Colombia que después eran canalizados hacia la compra de acciones y compañías vinculadas con los accionistas de InterBolsa. Estas mismas acciones serían la base de los 'repos' que hoy están en entredicho.

Las autoridades están investigando hasta dónde van las relaciones entre la firma InterBolsa y el Fondo y si sus accionistas son los mismos -o están relacionados- para ver si se habría configurado algún tipo de conflicto de interés. En otras palabras, si cuando los dueños de InterBolsa les recomendaban a sus clientes comprar acciones de Fabricato estaban pensando en sus propios intereses o en los de los clientes. En los informes de inversión de la firma comisionista en el último año y medio siempre se recomendaba comprar la acción de la textilera a pesar de que sus resultados eran muy malos. Esas recomendaciones contribuyeron a que el precio de la acción aumentara casi un 300 por ciento en poco más de un año. Solo al final, cuando el Titanic ya se había estrellado contra el iceberg, InterBolsa recomendó mantener o vender la acción. Si se llega a establecer que hubo conflicto de interés sería muy delicado ya que en el mercado financiero esta es una conducta ilícita que tiene implicaciones de responsabilidad civil. Frente a esta posibilidad, Rodrigo Jaramillo es tajante: "No hay el más mínimo riesgo que eso sucediera. Todos los negocios han sido absolutamente independientes y no los mezclamos". 

En medio de la incertidumbre que ha provocado esta historia, hay un interrogante que muchos se están haciendo. ¿Era este un caso de una crisis anunciada y que pudo evitarse si las autoridades de supervisión y vigilancia hubieran actuado a tiempo? La verdad es que quedan muchas dudas al respecto y lecciones hacia futuro. 

Por otro lado, lo que parece inevitable es que aquí van a perder plata varios. Para comenzar los accionistas de InterBolsa, quienes dejaron de vender una compañía que, según ellos, costaba más de 400 millones de dólares, y que hoy tiene un valor incierto, que sin duda alguna, será -si acaso- una fracción de esa suma. A eso habría que agregar los 80.000 millones de pesos sobre los cuales se comprometieron a responder por encima del valor de sus acciones. 

Los segundos perdedores serán los accionistas de Fabricato, cuya acción en el momento del descalabro estaba en cerca de 90 pesos y que seguramente se desvalorizó sustancialmente. Los terceros podrían ser algunos acreedores y contrapartes de InterBolsa. Esto podría incluir bancos, comisionistas de bolsa, y otros inversionistas  a quienes la firma o les debe plata o tenía un contrato cuyo cumplimiento es posible que no logre honrar. También podrían perder los clientes que tienen 'repos' a través de ellos no solo de Fabricato, sino de otros emisores.

En resumen, la primera conclusión de este descalabro es que llegó la hora de poner en cintura a las llamadas operaciones 'repos' y vigilar los excesivos riesgos que asumen las firmas con este negocio. Queda claro que ninguna autoridad se preocupó por la excesiva concentración que tenía InterBolsa en estas operaciones a pesar de que era fácilmente detectable. "El caso de los 'repos' de Fabricato que tenía la firma debió prender las alarmas en la Bolsa de Valores o en el Autorregulador del Mercado de Valores", señaló un analista del mercado.

El espejo de lo que sucedió en Wall Street en 2008, con muchos de los bancos, no es muy lejano. La tormenta se fue alimentando de varios factores: excesos en el mercado de valores, falta de regulación, ambición, autoridades miopes, y riesgo excesivo. Todo terminó golpeando como un tsunami las tranquilas orillas donde se encontraban los clientes e inversionistas, que hoy se preguntan qué va a pasar con su dinero. 

Ahora bien, una cosa es un error de cálculo, asumir demasiados riesgos o excederse en sus operaciones como ya quedó demostrado con el caso InterBolsa, y otra, muy diferente, mezclar los intereses del dueño con los de los clientes como está por investigarse. Ojalá que la caída del pequeño Lehman Brothers colombiano deje grandes lecciones para las firmas, el gobierno y los inversionistas colombianos. 

¿El eslabón perdido? 

Interbolsa era corresponsal del fondo Premium y muchos creen que esta relación tuvo que ver con el crecimiento del grupo finaciero y empresarial.

En medio de la crisis de InterBolsa, un nombre ha salido a la palestra y muchos no entienden qué tiene que ver con la caída del mayor comisionista de bolsa del mercado. 
Se trata del Fondo Premium constituido en Curazao y que se cree ha tenido que ver en todo el crecimiento del Grupo InterBolsa. 

A través de dicho Fondo se captaban ahorros de personas en Colombia, que después eran canalizados hacia la compra de acciones y otras propiedades que aparentemente tenían vinculación con accionistas de InterBolsa. Los recursos entraban al país a través de dos empresas: Valores Incorporados S.A. y Rentafolio Bursátil y Financiero S.A.S. Ambas sociedades son actualmente accionistas de Fabricato y de otras sociedades del Grupo InterBolsa y sus dueños. 

La gran pregunta que muchos sospechan es si se cruzaron los intereses de los clientes con los de los dueños de InterBolsa. “Valores Incorporados es una compañía del Fondo Premium, que a su vez es gestionado por accionistas de InterBolsa. Acá hay implícito un conflicto de interés, porque la comisionista, cuando conseguían clientes, estaba pensando simultáneamente en sus propios intereses y en los de sus clientes los cuales no siempre coinciden”, dijo una persona que conoce ambos negocios. Serán las autoridades, sin embargo, las que deben determinar si se configuró o no el conflicto de interés. 

Ahora bien, hay un tema muy espinoso con la rentabilidad del Fondo Premium. Algunos se preguntan si por esta vía se llegó a afectar a los inversionistas que pusieron su plata en lo que consideraban la seguridad de Curazao. El asunto es el siguiente: los dos canales a través de los cuales invertían en Colombia tenían acuerdos de participaciones con compañías pertenecientes a accionistas de InterBolsa. Queda por establecer si a través de esta figura los recursos de los clientes se direccionarían con base en las prioridades de los accionistas de la comisionista por encima de las de los depositantes. 

Rodrigo Jaramillo, presidente del Grupo InterBolsa, sostiene que la relación de la firma comisionista con el Fondo se limitó exclusivamente a la corresponsalía en Colombia. Pero, la verdad es que cuando se llega hasta el gestor del Fondo, esto es Premium Capital Investment Advisors Ltd. aparecen, según informaron fuentes a SEMANA, nombres como Juan Carlos Ortiz y Tomás Jaramillo. 

El viernes pasado, el gestor emitió un comunicado a sus inversionistas, a raíz de los líos que afectan a InterBolsa. La información señala que el valor estimado del portafolio, incluyendo dinero en efectivo, al 31 de octubre de 2012, era de aproximadamente 174 millones de dólares. Agrega que después de las circunstancias de InterBolsa, Fondo Premium cree que perderá mínimo 60 millones de dólares. Pero los inversionistas colombianos que pusieron la plata no solo perderán este dinero, sino que se podrían ver expuestos a una sanción por parte de la Dian que está detrás de lo que sucedía con este fondo. Juan Ricardo Ortega afirma que la entidad investigará si las personas escondieron sus patrimonios y evadieron impuestos. La Dian solicitará a las autoridades de Curazao información sobre los inversionistas para indagar si efectivamente hubo evasión de impuestos. 

¿Qué pasa con la vigilancia? 
Muchos se preguntan dónde estaban los organismos de control. Hoy, extrañamente, nadie supervisa los grupos financieros en Colombia.

Con la caída de InterBolsa, surge la pregunta sobre si falló la regulación y la supervisión que se ejerce sobre las firmas comisionistas. Algunos analistas del mercado creen que sí, pues piensan que las autoridades han debido parar a tiempo el excesivo riesgo que concentró InterBolsa con las llamadas ‘operaciones repo’. En el mercado se hablaba de este riesgo que estaba asumiendo la firma, pues manejaba un volumen muy alto de ‘repos’ de una sola especie (Fabricato) y eso fue, a la postre, la gota que rebosó la copa. Aunque se trata de mecanismos legales para manejar la liquidez en el mercado y todas las comisionistas las utilizan, ha quedado comprobado que el exceso en su manipulación por parte de las firmas puede traer graves problemas al mercado. 

Pero también este caso ha dejado al descubierto que existe un vacío en la legislación colombiana en lo relacionado con la vigilancia de los grupos financieros, como el caso del Grupo InterBolsa. Si bien la Superintendencia Financiera actuó rápidamente sobre la firma comisionista de bolsa, y tienen todos los reflectores puestos sobre la sociedad, no ocurre lo mismo sobre el grupo. Aunque se trata de un emisor del mercado, por ley la Superintendencia no ejerce vigilancia plena. Esto significa que no va más allá de solicitarles sus estados financieros y no llega al mínimo detalle de sus operaciones. Lo crítico es que tampoco la Superintendencia de Sociedades tiene competencia para vigilarla. El propio gobierno cree que es urgente, corregir este vacío. 

Algunos se preguntan si la Super-intendencia Financiera no esperó mucho tiempo para intervenir a InterBolsa. La verdad es que por ley la toma de posesión solo se puede hacer cuando una firma incumple con un pago a un acreedor. Hay que decir que la Superintendencia actuó rápidamente, una vez tomó posesión de la entidad, para evitar que el riesgo de InterBolsa se convirtiera en un riesgo sistémico en todo el mercado. 
Lo cierto es que las crisis dejan lecciones. Y en este caso les dejaron varias a las autoridades. También hay lecciones para las propias firmas de corredores sobre el modus operandi, el profesionalismo, la transparencia y la responsabilidad que tienen a la hora de manejar dinero del público. 

Fabricato: el talón de Aquiles 
InterBolsa inundó el mercado con ‘repos’ de la textilera que la llevaron al descalabro.

La historia de InterBolsa en los dos últimos años, pasa por Fabricato, una de las compañías insignes de Antioquia que, como todas las viejas textileras, hoy no es ni sombra de lo que fue en el pasado. 

Fue el empresario italiano Alessandro Corridori quien hace tres años puso sus ojos en la textilera paisa, pues no tenía dueño controlante, lo que posibilitaba tomar posiciones y hacerse a un paquete importante de acciones. Corridori fue precisamente quien llevó el negocio de Fabricato a InterBolsa, y con plata de los clientes de la comisionista fue comprando cada vez más a la textilera. Llegó incluso a convertirse en su mayor accionista. 

Aparentemente, las acciones se compraban a título de otras personas naturales o de diferentes inversionistas, lo que ha llamado la atención de observadores y de las propias autoridades que están mirando cómo la propiedad de la textilera fue cambiando de manos. Hay quienes creen que si se escudriña bien, se podrían encontrar conexiones entre las personas que compraron poco a poco acciones de Fabricato y se hicieron a su control. Y de ser así, se preguntan por qué no se hizo una oferta pública (OPA) para hacerse a la compañía. 

Entre los compradores estaban la Sociedad Valores Incorporados S.A. y Rentafolio Bursátil y Financiero S.A.S, empresas que invierten recursos del famoso Fondo Premium. 
Rodrigo Jaramillo, su familia y directivos del Grupo InterBolsa le apostaron a la textilera. 
Hace un par de años, la comisionista comenzó con los ‘repos’ de Fabricato. “En el transcurso del tiempo, y con los accionistas de Fabricato, vimos que había una oportunidad importante de negocio, porque la acción de la compañía se estaba transando como al 20 por ciento de su valor intrínseco en ese momento”, le dijo Rodrigo Jaramillo a la revista DINERO. 

Una de las personas que impulsó el negocio de los repos de Fabricato fue Jorge Arabia, miembro de la junta directiva de la comisionista, y considerado uno de los cerebros de muchas de las operaciones financieras de InterBolsa. 

Pero finalmente todo el andamiaje se rompió, no sin antes haber hecho ganar mucho dinero a quienes incursionaron con las acciones de Fabricato en un principio, como Corredori. Compraron acciones de la textilera a menos de 30 pesos, y el título en cuestión de 18 meses se disparó a cerca de 90 pesos. 

En el mercado comenzó la desconfianza por la textilera porque sus resultados cada vez eran peores. El año pasado las importaciones de textiles aumentaron 42 por ciento y las de confecciones 65 por ciento, lo que representó un duro golpe para la industria. Este comportamiento se reflejó en los balances de las dos principales compañías. Coltejer, que fue adquirida por la mexicana Kaltes, perdió el año pasado 3.205 millones de pesos y a septiembre de este su saldo en rojo ascendió a 32.623 millones de pesos. Fabricato, por su parte, perdió el año pasado 5.636 millones de pesos mientras que a septiembre de este año las pérdidas se elevaron a 41.463 millones. 

Algunos no entienden por qué le seguían apostando a la compañía cuando la familia Jaramillo conocía muy bien el sector, toda vez que Rodrigo es miembro de la junta directiva de Coltejer y su hermano Juan Guillermo de Fabricato. Finalmente, el mercado castigó el exceso de confianza de InterBolsa en la textilera
Fuente:http://www.semana.com/nacion/interbolsa-detras/187908-3.aspx

30 sept 2012

Como determinar si usted administra bien sus finanzas

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalacios.jimdo.com

1. ¿Posee usted una meta de libertad financiera en tiempo y dinero?

2. ¿Conoce usted su flujo de caja mensual neto?

3. ¿Tiene usted presupuestos para limitar sus gastos?

4. ¿Respeta usted los presupuestos que ha definido para sus gastos?

5. ¿Su familia o pareja conoce su meta, su flujo de caja mensual y sus presupuestos?

6. ¿Su familia lo apoya para cumplir presupuestos y para llegar a su meta?

Si al menos una de las preguntas anteriores usted la contesto de manera negativa, significa que usted NO administra sus finanzas personales.

¿Qué implica contestar a cada pregunta con un NO?
1. ¿Posee usted una meta de Libertad Financiera en tiempo y dinero?
Si usted contesto NO a esta pregunta significa que usted si bien puede tener sueños, a final de cuentas no tiene metas para que se hagan realidad. 

Una meta Financiera en tiempo implica que usted ha planificado realizar durante X años que usted define, las actividades necesarias para llegar a su meta de dinero.

La meta de dinero estará expresada en Flujo de Caja neto (Ingresos – egresos) más que en patrimonio o bienes materiales.

Definir la meta en términos de flujo de caja implica que deberá trabajar en generar ingresos y controlar gastos y esto lo llevará a invertir.

2. ¿Conoce usted su flujo de caja mensual neto?
Dado que su meta debe ser establecida en flujo de caja neto, usted debe conocer su situación actual y actuar

Hay 3 posibilidades al analizar el flujo de caja neto, cada posibilidad requiere acciones inmediatas:

- Si es negativo: Es la situación menos deseable, significa que a usted gana menos de lo que gasta. Esto lo llevará a un nivel de estrés financiero y psicológico alto, su única salida si no analiza es financiar el déficit con prestamos, lo cual lo llevará a final de cuentas a la quiebra. 

- Si es cero: Usted esta al borde del abismo, cualquier circunstancia lo llevará a cero y empezará a tomar un mal camino.

- Si es positivo: Debe saber que en este caso su salud financiera dependerá de que tan lejos se encuentre del cero. Lo ideal es que su excedente sea alrededor del 25% del total de su ingreso, esto le permitirá invertir y así poco a poco aprenderá a generar más ingresos y por ende su flujo de caja se alejará más del cero.

3. ¿Tiene usted presupuestos para limitar sus gastos?
Si usted ha hecho el análisis de su flujo de caja, el siguiente paso es mejorarlo y un buen lugar para empezar son sus gastos, los cuales deben ser presupuestados.

Si usted presupuesta esta a un paso de controlar y si quiere ser libre financieramente usted debe controlar su gasto y así beneficiará su flujo de caja

4. ¿Respeta usted los presupuestos que ha definido para sus gastos?
No basta con presupuestar, usted también debe respetar lo que planeo. Solo así se acercará a su meta.

Respetar un presupuesto se entiende con un ejemplo: Si usted presupuesto $500.000 pesos para gastos de entretenimiento en el mes, y si se los gasto en el primer fin de semana, usted no debería salir a entretenerse más durante ese mes, y si lo hace sabrá que esta pasado del presupuesto y por ende deberá gastar más moderadamente.

5. ¿Su familia o pareja conoce su meta, su flujo de caja mensual y sus presupuestos?
Si no lo conocen no le ayudarán a respetar presupuestos ni a llegar a donde usted quiere, por esto debe involucrarlos y comprometerlos, de lo contrario pensarán que usted es un tacaño y que no quiere darles lo que necesitan en términos económicos.

6. ¿Su familia lo apoya para cumplir presupuestos y para llegar a su meta?
Ellos pueden conocer la meta, el flujo de caja y los presupuestos, pero si no apoyan todo es inútil. Enseñe a sus hijos y pareja a darle prioridad a su administración de finanzas personales, a su meta de libertad financiera y a la generación de ingresos.

Fuente: http://www.finanzaspersonales.com.co/columnistas/articulo/test-para-determinar-usted-administra-finanzas/47210

22 sept 2012

Cómo titular un texto

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalacios.jimdo.com


Apartado 651. Colombia, Julio 15 de 19…
Mi buen amigo Alfonso: He recibido tu carta del 10 junto con el libro de Walter F. Otto“Los dioses de Grecia”. Ojeé las primeras páginas, y creo que será una grata lectura. Pero, antes de dar rienda suelta a mis palabras y alejarme de mi asunto, quiero comunicarte la verdadera razón de estas líneas: Confieso que me sorprendió el tono con el que escribiste tu última carta. No comprendo por qué  dices que las palaras que merecieron para mí el cuento que me enviaste son “inútiles” y “sin sentido”.¿Debo recordarte que fuiste tú quien me instó a leerlo y a juzgarlo?
Llevamos, si no estoy mal, cuatro cartas en la misma discusión. Y ten presente que no me disgusta, ¡todo lo contrario! Quizá, creo, me extralimité en mi carta del 5 de Junio al juzgar tu texto directamente, al objetar sin dilaciones todos los aspectos del escrito, especialmente su título. Si ese fue el caso lo lamento, pero sólo quise dar una crítica apropiada a lo que me pedías. Sentí tal obligación al leer tu disertación, contenida en la misma carta, sobre la responsabilidad creativa en la obra de arte. La cual tomé al pie de la letra.
Pongamos los puntos sobre las íes. Creo pertinente evitar una discusión directa sobre tu obra, en este caso tu cuento; sé que la obra de un escritor es parte fundamental de su ser. Por esta razón quiero hablarte, si me permites el atrevimiento, de la titulación en general, tal como yo la concibo. A diferencia de lo que crees, me parece un tema de capital importancia, al cual no se le tiene en suficiente estima. Si te das cuenta (y creo que de ahí viene tu total indiferencia sobre el tema) hay pocos ensayos o tratados teóricos, al menos no conozco muchos, en los que se trate el problema de la titulación. Y no es de extrañar, porque hay muchos que piensan al igual que tú: “El título es mera añadidura”
Me dices, para probar esta afirmación, que si eliminaras los títulos de todas las obras, el propio lector los supliría. Puedes tener razón; pero, ten presente que la obra no es del lector sino del escritor. El escritor no podría dejar al lector la tarea de implantar un título a su texto. Primero por razones lógicas, imagina una obra tuya con múltiples títulos, cada uno impuesto por capricho de los lectores ¿Cómo podrías hablar de él en términos generales? Y no sólo tú, (pues el escritor no debe pronunciar una sola palabra para explicar su obra) sino tus lectores. Y segundo, por razones teóricas. ¿Recuerdas lo que dice Alfonso Reyes sobre el diálogo literario entre el autor y el lector? El autor es quien crea la obra y el lector es quien reacciona a ella, su actitud es pasiva porque depende del texto que el escritor crea, y esto va para toda clase de textos. Cuando se les dice a los estudiantes que la lectura es una actividad activa sólo se apela a un modelo didáctico que busca una respuesta a partir del texto, no sobre él.
A través del título se concretizan procesos de acentuación. Por medio del título se le da preeminencia a un asunto especial; no sólo en el texto literario, también en el discurso periodístico, y otros. Basten, como muestra, y sin ánimo de formular una preceptiva de la titulación, algunas de mis ideas sobre los criterios que llevan a darle título a una obra: a) Puede presentarse que el título se refiera a un personaje primordial en la acción: (Martín Fierro, de José Hernández; El Quijote, de Cervantes; Benito Cereno, de Herman Melville; Eugenia Grandet, de Balzac) b) Que, a partir del título, se designe un espacio donde se integran las acciones desarrolladas: (En este pueblo no hay ladrones, de García Márquez; La pista de hielo, de Roberto Bolaño; Luvina, de Juan Rulfo; Irse de la casa amarilla, de Saul Bellow) c) Que haga alusión a las acciones que formulen juicios de carácter valorativo (Guerra y Paz, de Tolstoi; La peste, de Camus, La insolación, de Quiroga) d) A veces hace alusión a metáforas que insinúan los contenidos de la obra (La vida es sueño, de Calderón de la Barca; Un alma de Dios, de Flaubert, Rojo y Negro, de Stendhal)
No pretendo, con estos pocos ejemplos, agotar el tema o instituir una preceptiva de elección del título para una obra (ni más ni menos), sólo quiero mostrarte, Alfonso, algunos procedimientos que a mi parecer, y según mis lecturas, los autores han podido seguir. Es innegable que muchos títulos quedan por fuera de este listado, aunque la finalidad no es que los contenga todos. Como puedes darte cuenta, cada ejemplo satisface una necesidad de realce, de relevancia, de una idea. Es esta la importancia del título. A partir de él se multiplican las vías que el lector debe recorrer. Cuando leíste “El libro de arena” recuerdo que me dijiste “no de otro modo podría llamarse este cuento”. ¿Por qué? Quizá porque Borges quiso revelarnos la posibilidad de un libro inabarcable; y desde allí, desde su título, nos revela esta paradoja. Él mismo lo dice en Acerca de mis cuentos:
El libro de arena porque consta de un número infinito de páginas. El libro tiene el número de la arena, o más que el presumible número de la arena. Un hombre adquiere ese libro y, como tiene un número infinito de páginas, no puede abrirse dos veces en la misma.
Ahora bien, no negarás que el cuento pudo llamarse de otro modo, ya que, “no es parte misma de la obra sino la forma de prostituirse”, como aseguras en tu carta, y puede que tengas la razón, sólo que yo no diría prostitución, sino atracción, seducción. Quizá el libro pudo haberse llamado Holy Writ, o el Libro de los Libros…Nombres que encontramos en el cuento. Pero fíjate que siempre lo esencial, lo atractivo, lo que se realza, es el libro. Me atrevo a asegurar que Borges no pensó jamás en un nombre o en una ciudad para su título; porque el simple título contiene, ya, una historia. Contiene los diferentes caminos de interpretación. Con que, he aquí una segunda conclusión: el título debe abarcar la obra. Dudo mucho que sea de otro modo, puesto que, cuando se escribe un texto uno lo mira desde el sitio más lejano y se pregunta ¿Cuáles palabras abarcarían toda esta historia? Platón casi nunca mencionó en los títulos de sus diálogos a Sócrates —de quien podríamos pensar que es el protagonista de ellos— porque lo importante era el cambio mayéutico de Glaucón, Trasímaco, Crátilo, Fedón, etc. Y en verdad el diálogo gira en derredor de ellos, en ellos se evidencia el cambio, el logos que Platón deseaba anunciar.
Sin embargo, ¡cómo te conozco!, estarás pensando (pues he hablado, con Platón, de los antiguos) en los viejos poemas medievales que no llevan título. Debo decirte que, según el mismo Kayser a quien citas: “Sólo a partir del humanismo se generalizó la costumbre de titular las producciones poéticas.” Por tanto, puedo hablar del siglo V de Atenas, siglo en el que brotó el humanismo. Con todo, recordarás que antiguamente se utilizaba como título o epígrafe la forma o género de la obra como: “Canción”, “Oda”, “Himno”, “Soneto”; y que a partir de fines del siglo XIX, según Kayser otra vez, se estableció la costumbre de utilizar como título las primeras palabras del poema. El poeta quiere alejar todo pensamiento temático, no quiere hablar a distancia ni reflexivamente, sino que su poesía debe ser recibida como una ola que casi imperceptiblemente se alza y vuelve a deshacerse. Pero, contrariamente a esta  sencillez que vemos en la elección del título, te ofrezco este ejemplo de Umberto Eco en El nombre de la rosa:
Encontraba títulos fantasmagóricos, como este de Jean Baptiste Biot, de 1821: Recueil d’observations géodesiques, astronomiques et physiques, exécutées par ordre du Bureau des Longitudes de France, en Espagne, en France, en Angleterre et en Ecosse, pour déterminer la variation de la pésanteur et des degres terrestres sur le prolongement du meridien de Paris.
Grosso modo, eso es lo que ha pasado con la titulación antes y después. Y llegamos, ahora, a la actualidad, donde se piensa que el título debe ponerlo el editor: tu caso.
Para mí el título es una de las huellas que el escritor deja en su obra. No puede decirse que es el narrador, ente ficticio, quien lo elige. El título no es una marca ficticia. Es tan real como el escritor. No puede ser coincidencia que H.P. Lovecraft enAlgunas notas sobre algo que no existe, asegure, hablando de los títulos de sus obras, que dan fe de sus gustos:
…perpetrado a la edad de siete años y titulado «The Noble Eavesdropper» (El noble fisgón). Este no ha sobrevivido, aunque todavía poseo dos hilarantes esfuerzos infantiles que datan del año siguiente: «The Mysterious Ship» (La nave misteriosa) y «The Secret of the Grave» (El secreto de la tumba), cuyos títulos exhiben suficientemente la orientación de mi gusto.
¿Por qué, me dirás, tanta importancia, si a veces un buen título puede escogerse al azar? Sin duda, pero el título por ser una clave interpretativa debe respetar al lector; además no soy el único que reflexiona sobre este problema. Eco lo menciona en “Apostillas a El nombre de la rosa”: “Por desgracia, un título ya es una clave interpretativa. Es imposible sustraerse a las sugerencias que generan Rojo y negro o Guerra y paz”. Y más adelante dice: “Los títulos que más respetan al lector son aquellos que se reducen al nombre del héroe epónimo, como David Copperfield o Robinson Crusoe, pero incluso esa mención puede constituir una injerencia indebida por parte del autor”.
¿Entonces, dirás, qué hacer? Lo que se debe hacer, Alfonso, es tener conciencia de la importancia de la titulación. Eco plantea que sería mejor no poner títulos, pero ante esta imposibilidad explica que para poner un buen título, como él lo hizo en su libro, se debe saber que: “El título debe confundir las ideas, no regimentarlas”. Ya que el título debe preparar al lector ante la obra.
Con todo lo dicho hasta este punto, caigo en el peligro de que pienses que soy de esos que sólo por los títulos juzgan los libros. Nada más lejos de la verdad. Aunque, te confieso que eso me sucedió en mi juventud cuando me topé con Papillon, de Henri Charrière. ¿Qué crees que pensé?. Un libro que, además de estar disfrazado de best-seller, se titulaba Mariposa. Lo dejé. No lo leí la primera vez. Pero luego, por curiosidad lo abrí y vi, con sorpresa un mapa de Latinoamérica con señales de movimiento entre la Guyana francesa y Venezuela. ¿Cómo iba yo a saber que Papillon era el seudónimo del mismo Charrière que había sido llevado al presidio, se había escapado y narraba sus aventuras? Lo he releído muchas veces.
Para concluir, sólo me queda decirte que espero que aceptes mis palabras de la mejor manera. No creo que te haya atacado a ti directamente. Y que no creas que el título, al ser poco importante (hemos visto que sí lo es) puede dejarse a disposición del editor, o simplemente remplazarlo por cualquier palabra. ¡Responsabilidad creativa! Así pues, te dejo en compañía del lamento de Ricardo en Ricardo III, de William Shakespeare, grito que bien podrían dar algunas obras de arte:
No tengo título ni nombre,
no, ni el nombre que me fue dado en el bautismo,
pues está usurpado. ¡Ah, que infortunio
haber pasado por tantos inviernos
y no saber qué nombre puedo darme!

23 ago 2012

Plagio: la tentación de fusilar

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalacios.jimdo.com

Dos escándalos recientes de periodistas destacados reabren la interminable discusión sobre copiar material ajeno. ¿Qué lleva a reconocidos y experimentados intelectuales a apropiarse del material de otros autores?


La mayor —y más peligrosa— tentación que tienen los intelectuales es plagiar. Así quedó claro con dos asombrosos casos recientes. El primero involucra a Fareed Zakaria, editor de la revista Time, columnista del Washington Post y analista de cnn. El periodista de origen indio ha recibido además varios premios y títulos honoríficos y es miembro del comité académico de la Universidad de Yale. Por su brillante trayectoria nadie podía creer el escándalo en que se vio envuelto, cuando se descubrió que había plagiado a una colega. En una columna de Time sobre el lobby de la industria de las armas ante el congreso de su país, Zakaria tomó argumentos, citas y referencias casi idénticas de un largo reportaje publicado por la profesora Jill Lepore dos meses atrás en la revista The New Yorker.
La evidencia de la copia es tan obvia que Zakaria ni siquiera intentó defenderse. "Tienen razón. Cometí un error terrible. Es un grave fallo y es una falta por mi parte. Le pido perdón a ella -Lepore-, sin reservas, a mis editores en 'Time', y a mis lectores", dijo el periodista en un comunicado, pero no dio mayor explicación de sus motivaciones. Por ahora, la revista suspendió su columna y cnn canceló su programa mientras se aclara la situación. No se sabe todavía si habrá consecuencias legales.

El otro caso reciente involucra a Jonah Lehrer, periodista de The New Yorker, experto en ciencia y tecnología. El escritor, que estudió neurociencia, literatura y filosofía publicó a principios de año Imagine: How Creativity Works, un libro —paradójicamente— sobre los procesos creativos. El 30 de julio la revista Tablet publicó un artículo escrito por Michael C. Moynihan, en el que denunciaba que en el libro había varias citas inventadas del músico Bob Dylan. Y no sólo eso: también sostenía que Lehrer se había atribuido material de otros medios en su blog. De nuevo, el acusado no tuvo más remedio que aceptar: "Las mentiras se acabaron. Entiendo la gravedad de mi situación y quiero disculparme con todas las personas que he defraudado", escribió en su carta de renuncia a The New Yorker, una publicación famosa por su rigor en la verificación de datos.

Estas situaciones son comunes en medios de comunicación. Algunas son muy famosas, como la de Janet Cooke, quien recibió en 1981 el premio Pulitzer por un reportaje en The Washington Post sobre un niño de ocho años adicto a la heroína. Después de un tiempo se descubrió que el personaje principal de El mundo de Jimmy no existía: Jimmy era la suma de varias historias que la periodista había sintetizado. Cooke devolvió el premio.

Otro escándalo fue el de Stephen Glass, brillante editor de la revista The New Republic. Un colega suyo descubrió en 1998 que de los 41 artículos que Glass había publicado en la revista 27 eran absolutamente inventados. En 2003, Jayson Blair fue despedido de The New York Times por plagiar artículos de otros medios. Blair fue despedido y el diario se disculpó en primera página.

Breve historia de la originalidad 
El plagio ha sido eterno compañero de cualquier actividad intelectual, pero no siempre ha sido mal visto. En varios períodos de la historia, el Renacimiento por ejemplo, el valor de una obra de arte dependía de que fuera una buena reproducción de un clásico. Durante mucho tiempo las obras literarias no se firmaban y el concepto de autor nació en el siglo XIX.

Uno de los primeros en hablar del tema del plagio fue el filósofo francés Michel de Montaigne quien escribió un ensayo titulado De los libros, en el que cuenta que tomaba fragmentos de otros autores sin ningún pudor. En un extraordinario libro publicado en 2007, el estadounidense Jonathan Lethem hace una revisión histórica del fenómeno. En Contra la originalidad o el éxtasis de las influencias, recuerda casos de grandes artistas que se han inspirado en otras fuentes. Uno de los más interesantes es el de, justamente, Bob Dylan. Lethem sostiene que el músico ha hecho su carrera a partir de la mimesis: su música es una reunión de referencias a la literatura, el cine o incluso a otra música. Luego cita a Nabokov, a Shakespeare, a T.S.Eliot, a Borges y a otros grandes que han tomado el mismo camino: beber de diferentes fuentes para enriquecer su proceso creativo.

Esto siempre ha ocurrido. Georges Perec reveló, en 1965, que su novela Las cosas tenía párrafos enteros sacados de La educación sentimental de Gustave Flaubert. Perec hizo la confesión mientras recibía el premio Renauldot, justamente por esa novela. Su explicación fue muy simple: no sólo quería escribir como el autor de La educación sentimental, quería convertirse en Flaubert.

El mundo hispanoamericano no ha sido ajeno al tema. Hay casos muy sonados, como el de Alfredo Bryce Echenique quien fue acusado de plagiar a varios autores. La gran carrera del novelista peruano quedó manchada cuando no pudo defender el hecho de que muchas de sus columnas eran copias idénticas de otros textos. Arturo Pérez Reverte, el escritor español más vendedor en la actualidad, fue denunciado por el guionista Antonio González Gil de replicar el argumento de una de sus películas. Hace unos meses el profesor de la unam y escritor mexicano Sealtiel Alatriste, se vio envuelto en una investigación por supuesto plagio en su más reciente libro. El caso degeneró en un amargo debate entre los más reconocidos intelectuales mexicanos.

Colombia tampoco ha sido la excepción. Hace unos años se habló mucho de la profesora de literatura Luz Mary Giraldo, quien fue denunciada penalmente por una alumna por publicar un artículo con fragmentos de su tesis sin darle crédito. También es recordado el caso de tres profesores de la Universidad de Caldas, Josefina Quintero, Pablo Emilio Gómez y Raúl Ancízar, quienes fueron acusados en 1997 de robar propiedad intelectual. Aparentemente, los tres profesores copiaron un libro de otro académico, Luis Enrique Orozco Silva, y lo publicaron bajo su nombre.

También está fresca la historia que analizó la revista Arcadia, en su edición de julio, sobre el supuesto plagio del joven escritor Joseph Avski al cronista Alberto Salcedo Ramos. La directora de la revista y autora del artículo, Marianne Ponsford, sostuvo que, más allá del chisme, el tema ameritaba una reflexión profunda. "Vivimos todavía una época en que el autor es importante como mercancía pero, lentamente, la idea del anonimato o de la creación colectiva sí ha cobrado más protagonismo en las artes", escribió.

Impulso peligroso 
La pregunta obvia es, desde luego, qué conduce a autores con experiencia a copiar descaradamente. Es imposible que un profesional con la trayectoria de Zakaria copiara un artículo reciente de The New Yorker —uno de los medios más leídos del mundo— sin sospechar que sería descubierto. Algunos creen que los intelectuales se ven obligados hoy a estar presentes en todo tipo de medios y eso los lleva a reciclar material para ahorrar tiempo. También es posible que en una época en la que la información circula libremente y no es muy claro a quien pertenece, está muy latente el impulso de apropiarse de ella. Para algunos la academia ha sido la culpable, al promocionar entre las nuevas generaciones los conceptos de palimpsesto, hipertextualidad o influencia.

El debate está lejos de terminar. En su brillante análisis, Lethem sostiene que el arte no es más que una apropiación e interpretación de manifestaciones anteriores y que la absoluta originalidad, como tal, no existe. Pero que eso no le resta ningún mérito. El problema es de quienes quieren apropiarse de las ideas para siempre. "El plagio y la piratería son los monstruos que nosotros los artistas aprendemos a temer, ya que acechan en los bosques que circundan nuestros muy pequeños cotos de renombre y remuneración". Por cierto, en el último capítulo Lethem revela que todo su libro fue armado con fragmentos tomados de otros libros y que ninguna palabra es de su autoría. Una idea, sin duda, muy original. Fuente:http://www.semana.com/cultura/plagio-tentacion-fusilar/182878-3.aspx

14 ago 2012

Siete negocios que puede emprender desde la casa y sin mucha experiencia

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalacios.jimdo.com

Si tiene un fuerte espíritu emprendedor, considere dónde se encuentran sus fortalezas y pasiones, y comiencea trabajar a partir de ese punto para crear su propio negocio. Aqui algunas ideas para empezar.
1. Organizador de Hogares
Para algunos mantener una casa organizada les resulta muy natural. Para otros, es una lucha diaria. Si se ubica dentro de la primera categoría, podrá ayudar a los de la segunda.
Inspirada por miles de programas de televisión que muestran organizadores profesionales, Nettie Owens se dio cuenta que su habilidad de arreglar el desorden y de organizar podía constituir un negocio potencialmente lucrativo y hoy es una reconocida empresaria.
2. Tutor de Música o Académico
Si tiene habilidades de tipo académico o musical y es aficiónado a compartir su conocimiento puede disfrutar de un negocio de tutoría en el hogar. Puede dar clases particulares de asignaturas de escuela primaria como matemáticas básicas y geografía hasta materias como inglés, música o ciencias.
3. Negocio de pastelería
Si se considera aspirante a cconvertirse en la próxima Julia Child, la reconocida chef estadounidense, tal vez su vocación sea un negocio de pastelería en el hogar. Tortas, dulces para fiestas, gelatinas decoradas pueden representar costos bajos de producción y un negocio fácil de difundir entre círculos cercanos.
4. Niñera
¿Quién no requiere de los servicios de una niñera de reconocida experiencia y seriedad? Dedicarse a cuidar a pequeños puede ser un bueno negocio. Si le gusta cuidar a los menores de la casa esta opción le puede resultar.
5. Estilista personal
Cualquiera que tenga una afición por la moda debería considerar una carrera ayudando a otros a lucir elegantes. Esto es exactamente lo que Hilary Rushford hizo a principios del 2011 cuando fundó Dean Street Society, un negocio de estilo personal para “personas reales con presupuestos reales”.
6. Consultor de mercadotecnia
Muchas compañías pequeñas y personas creativas aman lo que hacen pero tienen una aversión hacia los aspectos técnicos de sus negocios. Ahí es donde los consultores de mercadotecnia entran en juego.
Hace aproximadamente 11 años, Cynthia Nevels se dio cuenta de la importancia del mercadeo y comenzó un negocio desde casa que ofrecía servicios a pequeñas empresas. “Debido a que los dueños de una empresa pequeña en ocasiones son alérgicos a la tecnología y a los “papeles”, mi negocio floreció”, afirma. Su negocio ayuda a los clientes a identificar el tipo de empresa en la que están y cómo llegar a su público a través de la marca.
7. Vender sus productos
Desde productos para el baño y de belleza a joyería artesanal, no hay límites en lo que puede vender (o lo que la gente comprará). Determine dónde se une su pasión y su habilidad, y luego comience a fabricar y vender. Puede usar plataformas en línea como Etsy, eBay, Artfire y Big Cartel. fuente:http://www.larepublica.co/alta-gerencia/siete-negocios-que-puede-emprender-desde-la-casa-y-sin-mucha-experiencia_17971

13 ago 2012

Contralor de Montería, al banquillo por un presunto plagio de informe

VARGAS PALACIOS & ASOCIADOS "Oportunos y Confiables" www.vargaspalacios.jimdo.com

Un voluminoso informe financiero y fiscal presentado por el Contralor de Montería, Jorge Esquivia García, al Concejo de Montería, llegó plagado de lo que a primera vista constituye una literal copia de un informe similar de su colega de la seccional de Armenia – Quindío, pero de la vigencia 2011.

En el documento radicado en la corporación de control político se refiere en varios apartes a la capital quindiana, lo que llamó la atención de los diecisiete concejalesque lo recibieron para someterlo a evaluación. Pero lo que más subrayaron fue la inexplicable confusión de los antecedentes históricos de Montería y la fecha de fundación de esta con la de Armenia.

Otros aspectos del citado informe, figuran en las páginas 33 y 36, en los que se describen ingresos de la Personería de Armenia, pero con las transferencias realizadas por el municipio de Montería, algo inverosímil y totalmente ilegal, lo que, de ser remotamente real, podría meter en líos, a funcionarios de la Alcaldía de Montería.

Igual situación fue detectada en el folio 36, en el que se refiere a las transferencias hechas en 2011 al Concejo Municipal por 1.442 millones de pesos, cifra que objetó la presidenta del cabildo monteriano, Ludys Rodríguez, quien reveló que la cifra indicada es del Concejo de Armenia y que la de Montería es de 1.109 millones de pesos.

Descuido e irrespeto

Sobre este bochornoso episodio, este medio consultó la opinión de dos miembros del Concejo de Montería. Frente a estas anomalías, la presidenta de la corporación, Ludys Rodríguez, advirtió que el contralor Jorge Rafael Esquivia fue citado para el mes de julio para que en plenaria explique lo plasmado en el informe enviado. “Es un gran descuido... no es una sola sino muchas las veces que se refiere a Armenia como si fuera Montería”, declaró la concejala y apuntó que es preocupante que el ente de control que fiscaliza al concejo haya cometido ese error. Finalmente, Ludys Rodríguez describió a Esquivia como un buen profesional del derecho.

Consultado por este medio, el concejal Rafael Gómez calificó el hecho como una falta de respeto con la corporación, aunque indicó que el funcionario cuestionado tiene derecho a defenderse y se abstuvo de lanzar juicio sobre el polémico informe financiero. “Creo que al contralor le faltó precaución y falta de asesoría, ha debido revisar antes de firmar”, señaló el concejal Gómez.

No hay plagio: Contralor

Por este insólito hecho, el Contralor Municipal, Jorge Esquivia García, aseguró a este medio que “en ningún momento se ha dado el plagio denunciado, lo que hice fue tomar el esquema o modelo del informe presentado por el contralor de Armenia, pero las cifras consignadas corresponden a Montería”, subrayó refiriéndose a que ya envió un informe corregido al concejo.

Esquivia García atribuyó el mar de errores a un “error involuntario de uno de sus subalternos, quien no se percató de leer lo que estaba encuadernando”, puntualizó el titular del ente de control fiscal y subrayó en el documento citó que fue elaborado tomando como referencia el de la seccional de Armenia.

Pero a pesar de las aclaraciones y correciones, la próxima semana estará en el banquillo frente a los diecisiete concejales, a quienes deberá dar las explicaciones del polémico caso, que ha sido calificado por la opinión como una copia, o plagio. fuente:http://www.eluniversal.com.co/monteria-y-sincelejo/local/contralor-de-monteria-al-banquillo-por-un-presunto-plagio-de-informe-8218